FÁBULA
FÍJATE.
VERSIÓN FINAL
-Fíjate-
le dije – no eres más que su juego, en esto te has convertido… después de haber
sido “su amor”, “su sueño”. Quiero que me cuentes ¿qué sentías tú por él?- ella
bajó sus hermosos, brillantes (y en ese momento llenos de lágrimas) ojos, ojos
que vi destrozados, a punto de desatar una tormenta de llanto, –lo hice parte
de mi vida- me dijo con su voz entre cortada, Yume- lo hice demasiado
importante… Es ahora imprescindible para mí. Creo que, al igual que siempre, he
dado más de lo que están dispuestos ellos a ofrecer, a pesar claro- dijo
riendo- de que jamás le pedí nada- dime- le dije, de nuevo levantando su cara a
la mía, -¿qué pasaba por tu cabeza en aquel entonces?, ¿cómo crees qué me
sentí?- mis palabras la confundieron aún más- entiéndeme Gema, aun no sabes lo
que se siente que se te vaya el aire cuando pone su mirada en ti- y en ese
instante, me perdí, yo sí sé lo que se siente oír la voz de alguien importante
para mí, ¡oh! Yume si supieras, si me prestaras atención, si notaras que tal
vez mis problemas sentimentales son más grandes que los tuyos; que estoy
enredada en las alas de un águila que me hace soñar, pensar, dudar de lo que
creen, de lo que piensas tú, tal vez si lo supieras no me lo perdonarías, si
supieras que aún lo veo, que aún lo espero y que me han dejado como a ti, hecha
un desastre, hecha una miseria. Ahí tus sollozos interrumpieron mis
pensamientos- quiero que me digas qué hacer. No tienes que hacerlo ahora,
tomate tu tiempo, vamos a casa para que lo pienses-.
La
mañana fue como las demás en esa época, fui a buscarte y, bueno, no llegaste,
me quedé esperándote por horas mientras pensaba que le iba a decir a Yume si no
tenía la más mínima idea de lo que me había preguntado. – llegaste, casi muero
esperándote Gema dime ¿lo pensaste?, ¿qué te han dicho los ancestros?- no supe
cómo decirle que no había hablado con nadie -ellos me han dicho que tienes que
seguir con él, ser feliz y si te lastima entonces lo dejas, e intentas ser
feliz con alguien más-. Ella enloqueció de felicidad, dio giros y giros en el
aire hasta que por un momento pensé que iba a caer para siempre y nunca la iba
a encontrar.
Bueno,
luego mi madre decidió que era más conveniente vivir en otro lugar, y resultó
muy bien para mí, creo que solo para mí, Yume terminó casándose con su gran
“amor” con el que terminaron la relación a los pocos meses; en lo que a mí
respecta, fue mejor dejarnos; te vi, como yo quería, te vi hecho un desastre,
te detalle y me diste pena, ¿eso era por lo que casi muero?, vaya los giros que
da el mundo… quién lo creería.
FIN.
MORALEJA: Si no me esperaste y no me cuidaste; no
esperes más que esfumarte.
AUTORES:
- Zareth Marcela Jerez Mantilla.
-
Yuleny
Melissa Soto Barajas.
Me encanto esta muy bien redactado pero tienes mas por mejorar
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